Sus equipos están sobrecargados de proyectos. La formación se percibe como una carga adicional, a menudo reducida a extensos textos normativos sin aplicación práctica clara. Como resultado, el personal completa los cursos de forma formal, pero tiene dificultades en situaciones complejas, lo que provoca incumplimientos normativos, desviaciones de protocolo y problemas de calidad de los datos.